Uno de los mayores retos de las compañías farmacéuticas es reducir el tiempo que tardan sus productos en salir al mercado. Un nuevo estudio global patrocinado por Oracle Health Sciences y llevado a acabo por Pharma Intelligence, revela que un 57% de los investigadores cree que sus problemas relacionados con la toma y manejo de datos provocan retrasos en los ensayos clínicos. Además, estos problemas son el mayor impedimento a la hora de cumplir con los requisitos regulatorios según el 81% de los entrevistados. Esto puede perjudicar incluso la finalización y el éxito de un ensayo clínico.

Principales problemas de datos

Cuando se habla de problemas con la recogida de datos se refiere principalmente a la toma de datos incompletos, inconsistentes, duplicados, irrastreables, etc. Otros ejemplos de fallos que pueden afectar gravemente a un ensayo clínico son, entre otros, la pérdida de datos de la visita de un paciente, la introducción de valores fuera de los rangos establecidos o un error a la hora de introducir el cumplimiento de los criterios de inclusión.

Por otro lado, los problemas que más perjudican al manejo y análisis de los datos son, en el siguiente orden, la falta de completitud, la mala calidad y la falta de limpieza de los datos. Respecto a esto último, los encuestados se quejan de pasar más tiempo limpiando la información que analizándola para tomar decisiones críticas sobre el desarrollo del ensayo.

En resumen, este estudio plasma la importancia tanto de una recolección de datos clínicos de calidad como de un correcto procesado para acelerar la entrada de tratamientos en el mercado, así como para minimizar el coste de los ensayos. No olvidemos que el objetivo de un ensayo clínico es evaluar si un fármaco es seguro, eficaz y de calidad, y para ello debe estar basado en datos de confianza.